Pedagogía

El mundo de la espera

El Mundo de la Espera es un proyecto de continuidad que trata de transformar las prioridades ya establecidas de los métodos inclusivos, donde los grupos mayoritarios facilitan el acceso a personas con capacidades diversas con el fin de ser acogidas y apoyadas para facilitarles el desarrollo dentro de una actividad. A diferencia de dicho planteamiento, este proyecto acoge a todas las personas que se muestren interesadas en profundizar sobre un aprendizaje que nazca de grupos compuestos por personas diversas y configure por sí mismo una mecánica de trabajo no adaptada especialmente para personas con capacidades diferentes. El mundo de la espera trata de permitir que el grupo establezca y diseñe sus propios conceptos, su propia gestión del tiempo y consignas que proporcionen una evolución igualitaria. Partimos de una base que propone la inclusión como una decisión que consienta la mezcla de peculiaridades relacionadas con la personalidad y no con la especialidad, dejando que el interés por la actividad sea la razón del encuentro. Pensar que un sector de la población posee un derecho para incluir a otro sector, demuestra una postura discriminatoria para algunos colectivos, puesto que este mismo derecho podría usarse para lo contrario. El mundo de la espera toma la responsabilidad de pensar y proponer actividades artísticas para personas de cualquier ámbito. Dicho proyecto se encuentra en un proceso de evolución que engloba tres actividades; Danza, Pintura y Técnica vocal, pero nuestro deseo insiste en ampliar y facilitar formación e información en otros aspectos creativos y de intercambio, estando atentos a las inclinaciones y los intereses que los propios usuarios manifiestan con la intención de crear un ambiente activo, actual y estimulante que permita un progreso personal, íntimo y libre para experimentar. Tener un proyecto en marcha durante todo el año nos facilita relacionarnos con personas vinculadas a la cultura y el arte, lo que favorece enormemente el contacto y la interacción con los artistas y profesionales interesados en las propuestas de Centro Caterina. Gracias a ellos hemos podido disfrutar de actuaciones en directo tanto de teatro, danza, exposiciones, incluso despertar el interés por recoger la información de los procesos creativos en el libro “Erótica de Olmo”, donde Emilio V. Añón, filósofo/escritor , tomó la iniciativa de acudir de forma presencial a los talleres durante un año con el fin de reflejar el desarrollo y evolución del Mundo de la Espera.